18 de febrero de 2011

Women Without Men

Ayer fui con Tom, Mona y Pablo al preestreno de Women Without Men, una película iraní dirigida por Shirin Neshat (Mona nos tradujo su nombre como Dulce Alegría, tendremos que fiarnos ), ganadora del León de Plata a la mejor Dirección en el Festival de Venecia de 2009.

La película se basa en la novela de título homónimo de la iraní Shahrnush Parsipur, y narra la historia de cuatro mujeres cuyas vidas se cruzan durante los días del golpe de estado en Irán de 1953.

Viene acompañada de la envolvente banda sonora de Ryūichi Sakamoto, perfecta para el ritmo de la película, y una fantástica fotografía a cargo de un tal Martin Gschlacht, quien construye una atmósfera realmente cautivadora.

Las cuatro mujeres protagonistas huyen de sus respectivos dramas personales (que simbolizan el sufrimiento de muchas mujeres iraníes), y buscando una salida hacia la liberación encuentran refugio en el mágico jardín de una casa de campo, donde conocerán el significado del compañerismo, el consuelo y la amistad.

Munis vive aterrorizada por su hermano fundamentalista que le está preparando una boda de conveniencia a la que ella se opone. En una secuencia alegórica de la película, Munis trata de suicidarse, es enterrada, y milagrosamente resucitada . A partir de ese momento se involucra activamente en la crisis política de su país.


Como salgas de casa, te rompo las piernas.

Faezeh es una íntima amiga de Munis, que aspira a casarse con el hermano de ésta. Es testigo del suicidio de su amiga, y mientras esconde un amuleto mágico que haga cumplir sus deseos de matrimonio, desentierra a Munis y la devuelve a la vida. Tras ser violada por dos hombres, y llena de vergüenza, no puede soportar la idea de regresar a su hogar, y huye al jardín de la casa de campo.

El cuerpo de una mujer es como una flor, una vez que florece no tarda en marchitarse.

Zarin es una joven prostituta que ofrece sus servicios en un prostíbulo, hasta que llega un momento en que es incapaz de distinguir la cara de sus clientes. Huye del prostíbulo, y purifica su cuerpo en una casa de baños (en una secuencia francamente desagradable ) antes de llegar al jardín de la casa de campo,

¡Zarin! ¡Tienes un cliente!

Fakhri vive amargada y humillada en un matrimonio con un general del ejército, al que claramente supera en cultura e inquietudes. Acaba abandonando a su marido e instalándose en una casa de campo, donde confluirán las historias de las cuatro mujeres protagonistas.

¡Tengo derecho a tomar a otras mujeres!

Dejo el trailer de la película para tratar de despertar el interés por verla


Bikos e apertas

pd:
La muerte no es difícil, lo es imaginársela.