Fragmentos de un cuaderno manchado de vino

Fragmentos de un cuaderno manchado de vino es un conjunto de ensayos y relatos de Charles Buwoski, uno de mis escritores más admirados, no en vano La senda del perdedor es uno de los libros que me llevaría a una isla desierta...

Le descubrí hace ya muchos años y he leído todo lo que me he ido encontrando: relatos, novelas, poesía, ensayos,... Aún tengo por casa algunas recopilaciones poéticas pendientes, poco a poco, no hay prisa

A su muerte acaecida en 1994 (antes de cumplir uno de sus sueños: llegar a los 80 y estar con una chica de 18... ), Charles Bukowski dejó abundante material inédito o publicado en revistas underground.

En este volumen se reúnen escritos dispersos, manifiestos, ensayos,... todos ellos muestras de su gran pericia narrativa.

Si alguna vez me ganara la confianza del público con toda seguridad me examinaría y me preguntaría dónde y cómo había fracasado. Me resulta imposible ver la poesía como un vehículo público, ni siquiera, tal y como existe, como un vehículo privado para la minoría. Es menos que que... cuando me aceptan un poema en una revista que publica poesía denominada de calidad, me pregunto dónde he fracasado. La poesía debe retirarse continuamente de sí misma, alejarse de sombras y reflejos, La razón de que se escriba tanta poesía mala es que se escribe como poesía y no como concepto. Y la razón por la que el público no entiende la poesía es que no hay nada que entender, y la razón por la que la mayoría de los poetas escriben es que creen entender. No hay nada que entender ni <recuperar>. Sencillamente hay que escribir. Alguien. En algún momento. Y no muy a menudo.

Los relatos nos muestran su peculiar forma de narrar, a caballo entre la autobiografía y la ficción, donde los perdedores, los desesperados, las prostitutas, los borrachos, las almas perdidas,... son el centro sobre el que giran las palabras de Bukowski. En el libro aparecen muchos relatos que pertenecen a Escritos de un viejo indecente, que si no recuerdo mal fue de lo primero que leí de Bukowski y su alter ego Henry Chinaski, me enganchó para siempre el condenado viejo y su manera de escribir

Entonces estaba perdido y era joven; ahora estoy perdido y soy viejo.

Bukowski siempre me ha parecido un autor nihilista, rebelde y totalmente inconformista con el mundo, que escogió un camino y una manera de vivir, y los llevó hasta el final (tras muchas botellas de vino). Eso siempre es admirable, sea cual sea la manera de hacerlo.

Escribir es, al cabo, el único camino que me queda, y si me queman en la hoguera no me consideraré un santo. Sólo habré creído que era el único camino. Es sólo cuestión de hacer lo que quieres hacer; ni un hombre de cada mil hace lo que quiere hacer.

En estos relatos hay algunos pensamientos políticos, pese a que él mismo se consideraba apolítico y anarquista, y más soñador que hombre de acción. No puedo dejar de estar de acuerdo con bastantes de sus ideas:

Yo estoy por un mundo mejor, por mi hija, por mí mismo, por ti, pero ten cuidado. Un cambio de poder no es un remedio. El poder para el pueblo no es un remedio. Todo tu pensamiento no debe hacer hincapié en cómo destruir un gobierno, sino en cómo crear otro mejor. No te dejes atrapar y engañar otra vez.

Por lo general, los hombres inteligentes demuestran una tendencia a no creer lo que cree buena parte de las masas, y la mayor parte del tiempo los sitúa bien cerca de la diana; otras veces hace que se quemen el culo, sobre todo en el ruedo político donde los ganadores dictan qué bando está en lo cierto.

En algunos de los manifiestos literarios trata de hacernos ver cómo construyó su estilo, purgando toda complejidad innecesaria, con frases directas y descarnadas. Realismo sucio creo que se le ha llamado a esa manera de narrar

El genio puede ser la habilidad para decir cosas profundas de una manera sencilla, o incluso decir algo sencillo de una manera más sencilla aún.

Sigo ofendiendo a la gente pero no escribo para ofender. Eso es facilísimo...

Hay también abundantes homenajes a los autores que él considera sus padres literarios; en especial a John Fante, al que llega a conocer en persona tras muchos años de búsqueda. Es realmente entrañable la descripción del encuentro entre estos dos grandes de la literatura.

Si aún no habéis leído nada de Bukowski, no sé a qué estáis esperando

Todo lo que poseas tiene que caber en una maleta;
entonces tu mente será libre.

Bikos e apertas

pd: El infierno linda con todas partes.