25 de abril de 2010

Trece contra la banca

En Trece contra la banca, de Norman Leigh, se narra como él y un grupo de jugadores de ruleta consiguieron hacer saltar la banca en varios casinos de Londres y Niza. Interesante

Una noche el joven Norman Leigh presenció cómo su padre era expulsado del Casino de Niza después de hacer perdido todo su dinero. La humillación quedó grabada tan profundamente en su memoria que se propuso elaborar un sistema infalible para ganar en los casinos. Muy pronto empezó a dedicar todo su tiempo libre a las matemáticas y a las estadísticas, investigando todos los métodos anteriormente utilizados y cómo mejorarlos.

La bebida, las mujeres y la conversación
derrotan a más jugadores de ruleta que las leyes del azar.


Unos años más tarde, en el verano de 1966, Norman Leigh acudió con un grupo de doce personas al mismo casino que vio perder a su padre con la intención expresa de ganar sistemáticamente en la ruleta. Dos semanas después, dado su éxito, se les prohibió la entrada en todos los casinos de Francia.

En el libro se detalla exhaustivamente el método empleado por Norman y su ejército de doce soldados, a los que entrenó hasta convertirlos en una especie de zombis para que apostaran durante horas, relevándose por turnos, a las seis apuestas simples de la ruleta francesa. Sólo esa asociación de varios jugadores que apuestan de forma combinada y ateniéndose a unas reglas muy estrictas según el método ideado por Norman, podía asegurar (o casi... ) la victoria sobre los casinos.

El método de Norman, el Labouchère Inverso, trata de maximizar las ganancias durante una secuencia favorable de aciertos, y rebajar rápidamente las apuestas ante una secuencia perdedora; el quid de la cuestión reside en que cuando las apuestas aumentan durante una secuencia ganadora, el jugador arriesga el dinero de la banca. El método empleado, unido a su uso por un grupo entrenado de jugadores cubriendo todas las apuestas simples, aumenta las posibilidades de hace aparecer lo que Norman denomina hongos, crecimientos de apuestas ganadoras (sin sobrepasar el tope de la banca).

Resulta una novela muy entretenida, en la que el autor explica detalladamente sus motivaciones para conseguir un método con el que ganar a la ruleta, su fase de aprendizaje, las bases matemáticas del sistema empleado, cómo organizó a su equipo de doce colaboradores, cómo los entrenó y cómo finalmente consiguieron su objetivo y fueron expulsados de los casinos franceses. El libro indaga también en las reacciones humanas ante la ganancia o la pérdida, en las transformaciones que provocan en el comportamiento.

Al acabar de leer la novela uno se pregunta cuánto hay de cierto en lo que relata Norman, si es así ¿por qué casi nadie gana en los casinos? Esto lo explica Norman en el libro, cuando diferencia entre apostadores y jugadores, así como la psicología que subyace en las mentes de los personajes que pueblan los casinos.

...la mayoría de las personas son más felices perdiendo, aunque, por supuesto, no lo reconocen...

Bikos e apertas

pd: ¿Quién se viene conmigo al casino? Ya sabéis que actualmente mi género favorito es la ciencia ficción...

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